Llevábamos semanas conociendo a los animales de la granja, los sonidos que hacían, los alimentos que se obtenían de ellos, los habíamos pintado, hicimos manualidades, nos contaron cuentos, etc.,Incluso la teacher Patricia nos enseñó sus nombres en inglés.

En la granja todo es divertido, nos enseñaron los animales de la granja y de la selva. Tocamos los animales y las plantas, porque allí todo se puede tocar, ver, sentir, en definitiva vivir a través de los sentidos para aprender de la manera más completa y dejarnos en el recuerdo un día inolvidable. Incluso asistimos a una obra de teatro donde los animales y los personajes  cantaban y bailaban.

Fue un día lleno de emociones, tanto que nuestros alumnos volvieron rendidos de sueño en el autocar pero muy contentos y con miles de historias que contar a sus papás y mamás.

Erase una vez un elefante llamado Elmer que es distinto a todos los animales de la selva, no se parece a nadie porque no es gris como el resto de la manada sino que tiene muchos colores es diferente y único.

En su cuento, Elmer nos enseña es que debemos aceptar y respetar a quienes son diferentes. También debemos aceptarnos a nosotros mismos tal y como somos y enfrentar la vida con buen humor.

Después de escuchar el cuento muy atentamente, nuestros alumnos, junto con sus profes han pintado con sus propias manos un Elmer grandote que ahora adorna la clase, recordándonos la importancia de la enseñanza que nos transmite.

Elmer es un gran amigo de los niños de San Vicente de Paúl y a través del cuento contado por las profesoras, además de disfrutar de una bonita historia, trabajamos principios tan importantes como la tolerancia, la integración de las personas, promovemos la educación intercultural integral, el respeto a quien es diferente y lo más importante, favorecemos el enriquecimiento personal que surge del conocimiento de las diferencias. ¿Y tú, también quieres conocer a Elmer?.

Así hemos realizado un taller muy interesante. Las profesoras nos han preparado por rincones, unos platos con los productos que nos proporciona cada animal: el huevo de las gallinas, la leche y el queso de la vaca, la lana de la oveja, el jamón del cerdo y las zanahorias que se las come el conejo, etc. Junto con los alimentos estaba el dibujo de cada animal para que lo identificásemos bien.

Cada grupo pasaba por todas las mesas y probaba, tocaba, degustaba cada uno de los alimentos para, de este modo, a través de la experimentación hemos adquirido un conocimiento tan cotidiano como importante.

Y dentro de nada... nos vamos a la Granja.

En esta ocasión, los alumnos de la Escuela Infantil vamos a trabajar con los cuentos. 

Y para ello, nuestras profes han elegido el cuento de “La oruga glotona”. La historia nos cuenta como una simpática oruguita cada día de la semana atraviesa una fruta diferente, saborea su sabor y descubre cuánto le gustan.

Nuestros alumnos escuchan encantados los cuentos que les cuentan sus profesoras pero, además de eso, han aprovechado la temática que nos ofrece la narración para realizar un taller con frutas, en el que han visto sus colores, sabores, texturas y con el que los niños han descubierto las distintas frutas, lo que les ha motivado a comérselas mejor.

Pera, manzana, ciruela, plátano, fresa, naranja, todas estaban riquísimas. También hemos repasado los días de la semana y los números, contando cuántas frutas se comía la oruga.